En la reunión del día antes de la prueba, Oscar Pajares, presidente del club, nos informa de todas las características de las diversas pruebas y nos pone en conocimiento
de la situación de muchas zonas de la prueba. Prácticamente hay zonas que son imposible de cruzar por la cantidad de barro y agua que hay.
En la prueba de MTB, hay que cruzar un arroyo que en las últimas horas ha aumentado su caudal hasta el punto de tener que cruzarlo andando, con las bicis en hombro. Y en la
prueba de duatlón, en la transición de carrera a pie, hay 3 km que son imposibles de cruzar en moto, quads, bici, todoterreno ni nada por el estilo, nos aconseja que nos llenemos la mochila de paciencia y nos hagamos la idea de que vamos a la guerra, salvando las diferencias.
Con estas noticias, comienza la prueba el sábado 29 de noviembre, con la salida de la Media Maratón a las 9:05. A las 9.30 salen los corredores del Duatlón y a las 10:30 los
participantes de las dos distancias de MTB.
Una vez metidos en la prueba del Duatlón, comienza el primer sector, 12 km de carrera a pie. La cabeza de carrera va muy tranquila, se nota que tienen respeto a la prueba, a la distancia o quizás al barro. Tal y como nos avisaron, en el km 3 comienza el barro, pero no es barro, es fango, pucha, llámenlo como quieran, pero los pies se metían hasta media pierna, incluso hubo participantes que perdieron las zapatillas en el barrizal. Zapatos fuera y a correr, andar o intentar avanzar descalzos.
Ya en el km 6 pisamos caminos mas firmes, y seguimos bien hasta la primera transición a la bici, en la cual nos montamos durante casi 40 kms. Era un circuito de unos 20 km, al cual había que darle dos vueltas y que coincidía, casi en su totalidad, con el circuito de la Media Maratón. Nos encontramos con zonas de bastante barro también, pero con el paso de la prueba y de la cantidad de bicis, se fue poniendo mas cómodo y fácil para el tránsito.
Llegamos a la segunda transición de la bici a la carrera a pie, otros 12 km y la mente solo puesta en esos 3 km de barro otra vez. Comienzan los calambres y tirones en la piernas. Sobre todo gemelos e isquiotibiales. Se consigue pasar con más pena que gloria pero llegados al km 10, los dos últimos kms, son de alegría, desahogo y ganas, muchas ganas de llegar a meta, para disfrutar del objetivo conseguido y de ver a la familia que esperaba.
En general, la prueba estuvo muy bien organizada, puestos de avituallamientos muy bien preparados, situados y atendidos. La organización muy bien equipada con la ayuda
de Protección Civil y Guardia Civil. A pesar de usar muchos caminos, cruces y pruebas simultáneas, estuvo muy bien señalizada, no había quejas entre los participantes sobre esos asuntos. Prueba marcada en el calendario para futuras ediciones.
Hacer mención a la participación en la modalidad de MTB, 80 km de varios integrantes del Club El Llantazo de Gerena, como son Gregorio González y Julio Ramos, 11 y 35 en la clasificación general respectivamente. Gregorio 1º en categoría master 50".